En 2014 la ONU proclamó el día 15 de julio como el día Mundial de las habilidades de la Juventud, puesto que es importante impulsar en ellos la adquisición y destrezas que les permitan interaccionar de forma exitosa con el mundo, al igual que incorporarse al mercado laboral.
No es una casualidad que exista este día y se haya centrado en este colectivo, pues empoderar a los jóvenes es una forma de hacer que sean influyentes en el mundo, en sus comunidades y por tanto son la generación que posibilita mantener las acciones y metas que llevamos a cabo para conseguir sociedades más justas y sostenibles.
La sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente es un tema de los más importantes de nuestra sociedad en el momento actual. La transición ecológica se ha centrado especialmente en la economía verde (economía más medio ambiente), cuyas previsiones se cifran en 12 millones de nuevos empleos (según el informe de Perspectiva Económica Mundial del Fondo Monetario Internacional).
Los países de la Unión Europea se han sumado para hacerlo posible a través de los fondos europeos Next Generation (Cuyo nombre como se puede ver guarda relación con los jóvenes), donde la inversión verde supondrá alrededor del 37% del total de los planes nacionales de recuperación. En el caso del gobierno de España este lo realiza a través del Plan de Recuperación, transformación y resilencia. Todos ellos apuestan por una economía circular cuyas bases son las 3R (reducir, reutilizar y reciclar). Dichas acciones persiguen el objetivo de descarbonizar la economía y preservar los recursos naturales.
La educación, especialmente la no formal (educación no reglada) y la informal (aquella que producimos con amigos, familia, medios de comunicación), nos ayuda a conseguir las habilidades, actitudes y aptitudes para el día a día y para podernos introducir al mercado laboral. Aquellas habilidades interpersonales, de comunicación, de gestión de tiempo que vinculan a una persona con otra son las conocidas Soft Skills. Estas habilidades son básicas para las empresas porque a pesar que a nivel curricular un joven pueda ser brillante a nivel técnico, pero poco competente a la hora de trabajar en equipo o de forma efectiva. Esas habilidades como la empatía, el compromiso, la sensibilidad ambiental son habilidades blandas, entrenables y transferibles. Esto unido al personal branding (marca personal) hace que las empresas busquen en sus perfiles gente con valores, con compromisos sociales y medioambientales. Cada vez es más común que las empresas busquen en sus directivos y empleados una marca personal con una tendencia a la sostenibilidad y el compromiso ambiental pues le repercute en su reputación empresarial.
Todo lo anterior unido a que los jóvenes son la generación criada con las nuevas tecnologías, y por tanto son un factor importantísimo para introducir la transformación digital en las empresas, no solo para abaratar costes y generar ingresos, sino por dar un paso más hacia la sostenibilidad y la eficiencia. Un ejemplo de estas empresas sería aquellas que usan la nube, haciendo posible la reducción de emisiones de carbono ya que utilizan menos materias primas.
Así pues, el empleo del futuro parece tener las siguientes cualidades: contribuye a la adaptación al cambio climático, favorece el crecimiento económico limpio, influye en el desarrollo y la reducción de la pobreza, limita las emisiones y de gases de efecto invernadero, minimiza los residuos y la contaminación y protege y restaura los ecosistemas.
Siendo así me planteo … ¿Y cuál es su opinión sobre incentivar la economía azul? ¿Es nuestro próximo reto? ¿Tenemos jóvenes con habilidades para ello?
DESDE EL CENTRO DE FORMACIÓN FOLGADO, TRABAJAMOS PARA ELLO.
Artículo escrito por: Mª Jesús Benlloch, Orientadora Laboral CFFolgado
